Son afecciones que impactan el pensamiento, sentimientos, estado de ánimo y comportamiento de una persona. Pueden ser ocasionales o duraderas (crónicas). Pueden afectar la capacidad de relacionarse con otros.
Las evidencias sugieren que el inositol en el cerebro está asociado con cambios en el estado de ánimo, por lo tanto podría reducir los estados de ansiedad y estrés.